Las regiones naturales del Perú. La clasificación de estas tres regiones naturales del Perú tiene origen desde la época de la conquista, la cual se establecieron 3 grandes zonas definidas: la costa, la sierra y la selva. Considerando algunos estudiosos también al mar como una región más, por ser parte del territorio nacional.
En el área continental la división en tres regiones simplifica la gran complejidad altitudinal y topográfica del territorio que ofrece una gama de características ambientales contrastantes que ha permitido que a lo largo del tiempo evolucionen diversas y exclusivas formas de vidas.
La costa
Es una estrecha franja árida y semiárida ubicada entre el océano Pacífico y la cordillera de los Andes, la cual se extiende casi paralela al litoral. Aunque no hay un consenso sobre el límite altitudinal que separa la costa de la sierra, éste se encuentra entre los 1000 y 2000 m de altitud donde se pierde la influencia de la baja temperatura del agua superficial del mar sobre la atmósfera, que ocasiona el efecto de inversión térmica costera (menor temperatura a menor altitud) y se restablece la relación normal entre temperatura y altitud (menor temperatura a mayor altitud). Se estima que esta región natural abarca el 11.74% del territorio nacional.
El paisaje costero esta caracterizado por una topografía relativamente plana, aunque con zonas de pie de monte y pequeñas montañas, y con predominancia de suelos arenosos y secos con excepción de algunos valles fértiles.
La matriz desértica que domina la costa presenta algunos focos donde se concentra la biodiversidad, tales como los bosques secos y las “lomas” que son de importancia por su riqueza y endemismo, además de los tillandsiales el monte ribereño alrededor de los ríos de la cuenca del Pacífico y los humedales costeros sustentados por el surgimiento del agua freática.
La costa presenta una temperatura promedio anual entre 19 y 20ºC con bajas fluctuaciones diarias y estacionales. La precipitación es muy escasa, menor de 30 mm por año en la costa central y sur, y algo mayor en el norte, lo que permite el desarrollo de bosques secos con predominio de “algarrobo”. Los ríos que atraviesan la franja costera presentan abundante caudal entre diciembre y abril, mientras que el resto del año el caudal disminuye o desaparece.
La región de la costa alberga al 54,6% de la población peruana, a pesar de que representa apenas el 11,74% de la superficie nacional. Si bien la mayoría del suelo costero es arenoso y seco, el asociado a los valles es el mejor para la actividad agrícola. En las últimas décadas en la costa ha ocurrido un proceso de expansión agrícola haciendo uso de nuevos sistemas de riego, posibilitando el desarrollo de grandes complejos agroindustriales y productos para exportación como espárragos, ají páprika, uvas, paltas, alcachofas, entre otras.
La Sierra
La macrorregión natural de la sierra se caracteriza por la presencia de la Cordillera de los Andes, con su compleja topografía y la gran variación altitudinal de su territorio. Se extiende desde aproximadamente los 2000 m de altitud hasta por encima de los 6000 m, alcanzando en la cima del nevado Huascarán los 6768 m de altitud.
Los suelos de la sierra son poco desarrollados con excepción de algunos valles interandinos, debido a extensos procesos de erosión provocados por las fuertes pendientes y por la constante pérdida de cobertura vegetal. La compleja fisiografía puede resumirse en cuatro paisajes generales:
- Las laderas de pendientes fuertes a medias que pueden ser muy diferentes entre sí dependiendo de la orientación geográfica que presentan.
- El altiplano, es decir las zonas de mayores altitudes y con poca pendiente.
- Los picos montañosos de mayor elevación que conforman glaciares con nieve permanente.
- Los valles interandinos de menor altitud.
Debido a esta marcada variación altitudinal el clima de la sierra es también variable, en especial la temperatura, que es inversamente proporcional a la altitud variando desde templado (18ºC) en los valles interandinos a frígido (por debajo de 0ºC) en las mayores elevaciones. Las precipitaciones varían en diferentes escalas y tienen una marcada estacionalidad, con un pico entre enero y marzo, mientras que de mayo a agosto la precipitación es baja y la insolación fuerte. Existe un marcado gradiente de lluvia oeste este, con las condiciones secas en las vertientes occidentales andinas (con promedios de 200 a 500 mm anuales) y con las más húmedas en la vertiente oriental (con promedios mayores a 1000 mm anuales), alcanzando incluso en algunos sectores de los Andes Orientales cerca de 9000 mm en ciertos años. Los valles interandinos presentan una menor precipitación que las cadenas montañosas. Otro factor importante que influencia las condiciones micro climáticas es la presencia de grandes lagos, que estabilizan la temperatura e incrementan las precipitaciones.
Las diferentes condiciones topográficas y climáticas permiten el establecimiento de diferentes tipos de comunidades biológicas, dominando los matorrales con hierbas estacionales en las vertientes occidentales del sur y centro, y los bosques secos y relictos húmedos hacia el norte; mientras que en las áreas de mayor elevación dominan extensos pajonales de diferentes densidades y biomasa, así como humedales altoandinos o bofedales en suelos de mal drenaje. En algunas localidades a gran elevación se encuentran relictos de bosques (comparables sólo con las coníferas del Himalaya) dominados por árboles de Queñoa o Quinual del género Polylepis y en algunos sectores con presencia de Puya raymondi o Titanka (Puya raymondi), una especie de bromeliácea paquicaule (gigantismo).
La sierra representa el 27,94% del territorio nacional, y es ocupada por el 32% de la población peruana. Las actividades económicas principales son agrícolas y pecuarias, además, en los últimos años, se viene desarrollando una gran actividad de extracción de recursos mineros que constituye la principal fuente de divisas en el país.
La Selva
Hacia la vertiente oriental andina disminuyendo la altitud se presentan matorrales y bosques húmedos que marcan el ingreso a la macrorregión de la selva. Al disminuir la elevación los árboles incrementan su tamaño y diversidad, pero en los sectores de elevaciones medias presentan un elevado endemismo y particularidad, en las denominadas “yungas”. Si bien la parte alta de la selva presenta pendientes marcadas, en su mayor extensión está ocupando una planicie ondulada cruzada por múltiples ríos de caudal variado. El clima de esta región es cálido y muy lluvioso durante todo el año. Las temperaturas oscilan entre 18 y 36ºC y las precipitaciones entre 1000 y 4000 mm anuales. En el sur de la selva peruana existe una corta estación seca entre junio y agosto, y en algunos años puede haber ondas de frío (friajes) que se originan en Argentina y bajan la temperatura hasta alrededor de 10ºC.
Las condiciones ambientales permiten el desarrollo de extensos bosques que contienen la mayor diversidad biológica del planeta. Estos bosques son de diferentes tipos dependiendo de la altitud en la cual se presentan, la topografía del área donde se desarrollan, el tipo de suelo y la saturación de agua del mismo. Son característicos los grandes árboles emergentes que alcanzan hasta 50 m de alto, y el dosel cerrado alrededor de 30 m. Los suelos son oscuros y muy poca luz llega hasta las plantas del sotobosque.
La selva ocupa el mayor porcentaje del territorio peruano (60,32%) pero sólo reside en ella el 13,4% de la población. En esta región habitan dos grandes grupos humanos, los nativos amazónicos (representados por comunidades indígenas de diferentes grupos etnolingüísticas) y los colonos (emigrantes principalmente de la sierra). En la amazonia se desarrollan diversas actividades como: recolección de frutos, caza, pesca agricultura de autoconsumo, y ecoturismo, Esta región posee recursos energéticos como el petróleo y el gas natural.
El Mar Peruano
El Perú tiene soberanía y jurisdicción sobre una franja de 200 millas a partir de la orilla y de una longitud de 3080 km de largo, abarcando desde el paralelo de Boca de Capones al norte, hasta el sur entre el paralelo del Punto Concordia y la perpendicular a las líneas de base en Tacna. El mar peruano comprende un complejo sistema de corrientes que da origen a un rico sistema de afloramiento, que le confiere una gran productividad. Su diversidad biológica marina es la más importante, y está representada por el Ecosistema del Afloramiento de la Corriente Peruana o de Humboldt, que condiciona los ambientes marino-costeros y es el más rico en el mundo por su alta productividad. Esta excepcional diversidad biológica ha sustentado a una de las industrias pesqueras más grandes del mundo y constituye el segundo sector productivo más importante del Perú.