Ecología. La ecología es una rama de la biología en la que se estudian y analizan las interacciones entre los seres vivos con el hábitat donde se encuentran, es decir, las relaciones que existen entre los factores bióticos (relaciones entre seres vivos) y los factores abióticos (condiciones ambientales).
Etimológicamente, la palabra ecología deriva del griego ökologie compuesta de la unión de los vocablos griegos oikos, que significa ‘casa’, ‘hogar’ o ‘vivienda’, y logos, que significa ‘estudio’ o ‘tratado’. En este sentido, ecología significa ‘el estudio del hogar’.
Fue Ernst Haeckel, científico alemán, quien creó el término ecología en el año 1869 con el fin de designar un nombre a la ciencia que estudia las relaciones entre los seres vivos y el medio ambiente.
Por tanto, el objeto de estudio de la ecología está en determinar cómo los factores abióticos (humedad, temperatura, entre otros) interactúan con los factores bióticos (relación entre la gran diversidad de seres vivos que se encuentran en un mismo hábitat).
De allí que la ecología haga caso particular a cómo las características particulares de un hábitat influyen en el desarrollo, modificación y comportamiento de las diferentes especies.
En este sentido, el concepto de ecología humana se refiere al estudio científico de las relaciones entre los seres humanos y el medio ambiente, incluyendo las condiciones naturales, las interacciones y los aspectos económicos, psicológicos, sociales y culturales. Por tanto, la ecología se enfoca en estudiar los ecosistemas o poblaciones en general.
Asimismo, la ecología es una ciencia en la que se desarrollan estudios sobre cuáles pueden ser los cambios que pueden sufrir los ecosistemas a partir de las actividades de los seres humanos.
Es importante destacar la importancia de los estudios ecológicos, que son multidisciplinarios, por lo que posibilitan ampliar los conocimientos en esta área de las ciencias, así como, diseñar estrategias y mecanismo enfocados en la preservación y conservación del medio ambiente.
Por otra parte, en la actualidad el término ecológico va más allá de las investigaciones científicas, ahora forma parte de campañas políticas y movimientos sociales que buscan la protección e interacción consciente del ser humano con el medio ambiente.
Por tanto, la ecología ha adoptado un carácter ambientalista y su objetivo es cuidar y mantener el equilibrio de las actividades humanas con las de nuestro hábitat.
Principales ramas de la ecología
Las principales ramas de estudio y de investigación en las que se divide la ecología son las siguientes:
- Autoecología: rama de la ecología que estudia cómo son las adaptaciones de las especies a determinadas condiciones de los factores abióticos.
- Demoecología (dinámica de la población): rama que estudia, desde la ecología y la demografía, las principales características de las comunidades o población que ocupan un determinado hábitat.
- Sin ecología (ecología comunitaria): rama de la ecología que estudia la interacción entre las comunidades biológicas y los ecosistemas.
- Agroecología: rama que parte de los conocimientos de la ecología y de la agronomía para desarrollar modelos de producción de alimentos en los que se toman en cuenta tanto el ecosistema como el entorno social.
- Eco fisiología (ecología ambiental): rama de la ecología que estudia los fenómenos fisiológicos en el medio ambiente, el cual puede experimentar alteraciones debido a diversos fenómenos naturales o a la actividad humana.
- Macro ecología: rama de la ecología que estudia los patrones ecológicos que se repiten a gran escala.
Interacciones ecológicas
En ecología, se estudian los procesos, la dinámica y las interacciones entre todos los seres vivos de una población, de una comunidad, de un ecosistema o de la biosfera.
Las interacciones ecológicas se caracterizan por el beneficio de dos seres vivos (armónicas) o por el perjuicio de uno de ellos (inarmónicas), y puede ocurrir entre seres de la misma especie (interespecíficas) o de diferentes especies (interespecíficas).
- Relaciones interespecíficas armónicas: la sociedad (organización de individuos de la misma especie) y la colonia (grupo de individuos de la misma especie con diferentes grados de dependencia entre sí).
- Relaciones interespecíficas inarmónicas: el canibalismo y las competiciones interespecíficas e interespecíficas. Son relaciones entre especies iguales, pero hay un perjuicio en al menos uno de los lados.
- Relaciones interespecíficas armónicas: el mutualismo (o simbiosis), la protocooperación, el inquilinismo (o epibiosis) y el comensalismo.
- Relaciones interespecíficas inarmónicas: el mentalismo (o antibiosis), el herbivorismo, la depredación, el parasitismo y la esclavitud.
Recursos naturales
Son recursos naturales todos los bienes de la naturaleza que sirven para el provecho del ser humano, tales como alimentos, materias primas y fuentes de energía.
Los recursos naturales se convierten en bienes o servicios para el consumo al pasar por procesos de extracción y transformación, de los que resultan toda clase de productos como alimentos, energía y materias primas (textiles, maderas, pigmentos, plásticos, etc.).
Los recursos naturales se forman por la incidencia de factores bióticos y abióticos en el ecosistema. Los factores bióticos son los inducidos por organismos vivos vegetales o animales. Los abióticos son factores inorgánicos o inertes como la temperatura, el aire, el agua, la luz, el suelo, etc.
La importancia de los recursos naturales radica en que de ellos depende la supervivencia de la especie humana, así como el desarrollo económico y cultural de las civilizaciones.
Los recursos naturales se clasifican de acuerdo a diferentes criterios, tales como:
- Según su capacidad de renovación.
- Según su disponibilidad para la explotación (o estado de desarrollo).
Tipos de recursos naturales según su capacidad de renovación
De acuerdo con la capacidad de renovación, los recursos naturales se clasifican en renovables o de flujo, no renovables o de stock, e inagotables o perennes. Esta es la clasificación más aceptada y extendida de los recursos naturales.
Recursos naturales renovables o de flujo
Campo de trigo.
Los recursos naturales de tipo renovable, llamados también recursos naturales de flujo, son aquellos que se reproducen en la naturaleza gracias a las condiciones disponibles en el medio ambiente.
Estos se regeneran a una velocidad proporcional o superior a su consumo. En consecuencia, su uso no los agota, siempre y cuando su explotación sea consciente, equilibrada y no exceda su capacidad de regeneración.
Ejemplos de recursos naturales renovables son:
- Árboles y bosques (fuentes de madera, corcho, pulpa para papel).
- Productos agropecuarios (agricultura y ganadería).
- Productos pesqueros (peces y mariscos).
- Biomasa y bio combustibles.
- Agua (siempre y cuando sea usada y tratada de manera que pueda reaprovecharse).
También son renovables la energía eólica, la energía solar, la energía mareomotriz y la energía geotérmica. Estas energías verdes, además de clasificar como recursos renovables, clasifican también como recursos inagotables.
Recursos naturales no renovables o de stock
Campo petrolero.
Los recursos naturales no renovables son aquellos que se encuentran en la naturaleza en cantidades finitas. Son recursos que se agotan con su uso o que su tiempo de recuperación es superior a la escala de vida humana, como el petróleo, que requiere miles de años de formación.
Ejemplos de recursos naturales no renovables son:
- Combustibles fósiles (petróleo, carbón, gas natural).
- Minerales (oro, plata, bauxita, hierro, etc.).
- Rocas (mármol, granito, caliza, alabastro, entre otros).
- Piedras preciosas (diamantes, rubíes, zafiros).
- Agua de los depósitos subterráneos (acuíferos).
Recursos naturales inagotables o perennes
Central de energía eólica.
Los recursos inagotables o perennes son aquellos que no se pueden agotar, independientemente de su consumo. Estos no dependen de factores bióticos sino estrictamente de factores abióticos. Esto quiere decir que los recursos inagotables no siempre están disponibles, ya que dependen del viento, la temperatura, el sol, etc.
Por ejemplo, no se puede obtener energía solar durante la noche. Sin embargo, tenemos la seguridad de que el sol saldrá nuevamente.
Todos los recursos inagotables son recursos naturales renovables, pero no todos los recursos renovables son inagotables.
Son ejemplos de recursos inagotables o perennes los siguientes:
- Viento (fuente de energía eólica).
- Radiación solar (fuente de energía solar).
- Mareas (fuente de energía mareomotriz).
- Calor del interior de la tierra (fuente de energía geotérmica).
Tipos de recursos según su disponibilidad o estado de desarrollo
Los recursos naturales pueden ser clasificados de acuerdo a su disponibilidad para la explotación económica.
Recursos actuales
Son aquellos que están disponibles. Esto quiere decir que han sido ubicados y se ha logrado determinar su cantidad con relativa precisión. Los recursos actuales están disponibles para su explotación o están ya en proceso de explotación.
Por ejemplo,
- Áreas de cultivo.
- Bosques.
- Zonas pesqueras.
Recursos potenciales
Se llaman recursos potenciales a aquellos cuya existencia se conoce, pero que por diferentes factores no pueden cuantificados ni explotados hasta tanto se cumplan determinadas condiciones.
Por ejemplo,
- Depósitos de petróleo que aún no pueden ser explotados por razones técnicas.
- Zonas potencialmente cultivables.
- Zonas de exploración minera.
Recursos en reservas
Los recursos en reservas son aquellos que se encuentran en yacimientos ya identificados que se resguardan como reservas.
Por Ejemplo,
- Yacimientos de combustible fósil.
- Yacimientos de energía geotérmica.
- Yacimientos mineros.
- Reservorios de agua dulce.
¿Cómo se explotan los recursos naturales?
Izquierda: zonas de cultivo en explotación. Derecha: cultivos agotados por sobreexplotación.
Los recursos naturales se obtienen a partir de su explotación. Se llama explotación de los recursos naturales o explotación económica al proceso de extraer, procesar y transformar los recursos naturales para el crecimiento de la economía.
Una explotación bien administrada debe tomar en cuenta el tiempo que demoran los recursos en consumirse y renovarse, así como el impacto de la intervención industrial en el ambiente.
El problema de la sobreexplotación
Hablamos de explotación indiscriminada o sobreexplotación de los recursos naturales cuando el ritmo de extracción y consumo agota la existencia disponible o supera su capacidad de recuperación.
Las consecuencias más evidentes de la sobreexplotación son:
- extinción de las especies;
- destrucción de hábitats y ecosistemas;
- desertification de los suelos;
- calentamiento global;
- agotamiento de los recursos.
Protección y conservación de los recursos naturales
Para garantizar la protección o conservación de los recursos naturales, se han emprendido diferentes iniciativas que promueven la explotación equilibrada, el desarrollo sustentable y el consumo responsable. Tales iniciativas han venido de la mano de disciplinas como la biología de la conservación y la gestión del medio ambiente y los recursos naturales. Un ejemplo de iniciativas amigables con el ambiente es el desarrollo de energías renovables o energías verdes (energía solar, eólica, geotérmica o mareomotriz), que además de ser inagotables, suponen un menor impacto ambiental.